Por el reconocimiento nacional e internacional que recibieron algunos de sus integrantes, el Grupo Ancoa de Linares (1958-1998) fue el colectivo artístico y cultural más relevante de la región del Maule durante el siglo XX.
A lo largo de su existencia congregó a más de 25 integrantes, entre los cuales figuraron los pintores Pedro Olmos, Sergio Monje, Armando Álvarez, Reinaldo Sepúlveda, Paz Olea, Silvia Araya, Rolando Gallego y María Francisca Morales; el periodista Samuel Maldonado y Ramón Belmar Saldías; los escritores Manuel Mesa Seco, Emma Jauch, Moisés Castillo, Alberto Reyes Lapiedra, Emilio González, Augusto Santelices, Enrique Gómez, Juan Mihovilovich, Mario Lértora; los músicos Paulina Espinoza, Eliana Peretti y Marta Rivas; la bibliotecaria Angela Gidi, los arquitectos Gonzalo Navarrete y Marina Vergara de Navarrete, y el historiador local Jaime Gonzalez Colville.
Además de las numerosas reuniones literarias y poéticas, exposiciones y ferias artísticas que fomentaron y apoyaron, su mayor logro –reconocido por ellos mismos– fue la fundación del Museo de Arte y Artesanía de Linares (MAAL), iniciativa que comenzó a gestarse en 1962.
El nombre del colectivo fue sugerencia de Samuel Maldonado (Quevedo, 2016), por uno de los ríos que converge en las cercanías de la ciudad de Linares. El matrimonio Olmos-Jauch y Manuel Francisco Mesa Seco establecieron las directrices del grupo, por lo cual son considerados sus promotores fundamentales.
Las reuniones solían efectuarse una vez al mes en la casa-quinta de Olmos y Jauch (ubicada en calle Arturo Prat 642, Linares), con el objeto de «propiciar el perfeccionamiento individual y la extensión cultural» (Quevedo, 2016). En dichos encuentros de coordinación se decidían las actividades a desarrollar que, desde sus campos laborales en importantes cargos públicos de la ciudad, los miembros de Ancoa apoyaban directamente tanto en lo económico como en lo organizacional.
Rescate de la identidad local
El Grupo Ancoa resaltó un imaginario específico respecto de las costumbres, colores y olores de la ruralidad chilena –imaginario determinado por las experiencias y afectos personales de sus integrantes en el Maule–. Como indica Gonzalo Navarrete (último presidente de Ancoa): «[…] unidos sin embargo por algo común [...] su profundo amor por lo nuestro, por las cosas simples que nos rodean y que ellos a través de la forma y el color logran que trasciendan» (boletín n° 8, 1988, p. 2).
En este sentido, el grupo desarrolló y articuló la representatividad de lo rural en instituciones relevantes de la ciudad, como el mismo MAAL. Gestionó así variadas iniciativas educativas y expositivas que acercaron las expresiones artísticas y literarias de la región a la comunidad.
Dentro de las colecciones del MAAL se encuentran los Poemas Ilustrados, que fueron gestionados por el colectivo y que integran las artes visuales con textos de Gabriela Mistral, Pablo Neruda y Federico García Lorca entre otros. Se trata de más de cincuenta obras, realizadas a partir de la década de los 60 para resaltar acontecimientos importantes como el aniversario de la institución o de la ciudad.
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